Marina nos muestra dos puntos de vista tan diferentes como equivalentes son los chicos y las chicas. Una novela realista sobre los primeros amores y la vida adolescente en general con la que cualquiera de nosotros puede sentirse identificado.
Y si es él... y si es ella... es una novela muy bien dirigida y desarrollada de la que todos podemos aprender algo nuevo. Nunca viene mal un punto de vista diferente, ¿o sí?
Lo primero, decir que me ha parecido una historia tan real como atemporal. Y es que las reglas del amor se pueden aplicar igual ahora que hace quince años. Lo mismo se puede decir de las inquietudes del adolescente.
El mérito de Marina no está en crear una historia, situaciones o siquiera personajes originales. El mérito está en convertir una historia mundana en una novela interesante, divertida y dulce.
Me ha gustado mucho la manera de narrarla, porque los protagonistas, los que redactaban su día a día en respectivos diarios, no eran el verdadero eje de la trama (al menos, no al principio). Luego, al tiempo que adquirían autoestima y seguridad en ellos mismos, era cuando tomaban el relevo como protagonistas de sus propias historias de amor.
He de decir que ya he leído varios libros de esta colección (no saga); Chicas, y aunque la mayoría van más dirigidas al género femenino, esta es, sin duda, apropiada para ambos sexos.
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