Just the Sexiest Man Alive; creo que ya está todo dicho en el título. Solo leerlo ya promete, ¿verdad? Momentos cómicos, apasionados, un poco de locura, pero también de picardía, y sobre todo, amor. Julie, definitivamente, cumple con lo prometido.
Hay mundos que parecen irreconciliables, sobre todo cuando hay prejuicios insolventes de por medio. ¿De quién fue el error por el que su posible relación no pueda funcionar?
En Just the Sexiest Man Alive vemos un mundo del que todos parecemos saber, pero que podría no ser tan transparente como aparenta. Y, sí, me estoy refiriendo a Hollywood. Donde los publicistas mueven los hilos, los actores no trabajan solo en el plató y la gente de a pie no parece tan cuerda a su lado. Parece que tratásemos con fuerzas magnéticas, depende de la cara que pongas para sentirte atraído... o ahuyentado.
Toda la novela mantiene un ambiente cómico y divertido. Pero a la vez dulce y emocionante. No es que la trama tenga mucho misterio, y el final está cantado. Pero, ¿acaso no es más importante (y divertido) el viaje que el destino?
Me ha parecido una novela muy recomendable, muy fácil de disfrutar y de amena lectura.
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